Tenía 5 meses de embarazo cuando llegó a San Gil. Debido a la falta de dinero para los alimentos y el estado de salud, decidió emprender junto con su esposo un nuevo viaje caminando hasta Bucaramanga, esperando encontrar atención médica y poder establecerse allí.

Cuando llegaron a esta ciudad la principal dificultad fue encontrar una fuente de ingresos y un lugar donde vivir; Yoandry no podía trabajar por su enfermedad avanzada, el embarazo de alto riesgo y el cuidado de su hijo de 2 años. Su esposo tuvo que trabajar limpiando vidrios de los carros para cubrir las necesidades del hogar.

“Ha sido muy difícil llegar hasta acá, fui hospitalizada al llegar a Bucaramanga. Casi pierdo mi hijo, nació prematuro y mi otro hijo estaba bajo de peso; en Venezuela no teníamos oportunidades, nos arriesgamos para darle mejor vida a nuestros hijos y por mi salud,” relató Yoandry.

Poco tiempo después, una conocida le comentó sobre el proyecto SASVEN que implementa ADRA. Su hogar fue registrado y recibió la información de los servicios humanitarios.

Nos cuenta: “todo lo que he recibido de ADRA ha sido excelente, mi hijo mayor tenía cuadro de desnutrición 2 y gracias a la ayuda de alimentos y atención por nutrición mi niño recibió su tratamiento, ha crecido y ha subido de peso; mis medicamentos y controles médicos, todo ha sido excelente”. Su hogar fue beneficiario de la asistencia alimentaria durante 4 meses, que brindó ADRA Colombia con el apoyo de ADRA Internacional; recibieron orientaciones nutricionales para mejorar su calidad de vida y aprendieron a usar el dinero para comprar alimentos de manera más eficiente. Toda su familia asiste a consultas médicas donde revisan su estado de salud, reciben los medicamentos que necesitan y Yoandry puede tener seguimiento para su enfermedad.

Ella nos dio un mensaje con voz de agradecimiento: “ADRA llegó en el momento justo, cuando más lo necesitábamos gracias por ser ángeles de Dios en medio de nuestra prueba”.